Rocío de Moreno visitó a niñas y niños de la unidad educativa Eugenio Espejo en el marco del Día Internacional de la Niña

Un papel, un lápiz y varias pinturas de colores bastaron para que los 35 niños y niñas, del Quinto B de la Unidad Educativa Eugenio Espejo de Quito, dejaran fluir sus sueños del futuro. Algunos retrataron médicos, otros tantos policías, veterinarias, profesores, científicas; incluso un par de ellos se vieron como presidentes. Estos sueños son los que pudo conocer Rocío de Moreno, presidenta del Comité Interinstitucional del Plan Toda una Vida, quien este jueves visitó el centro educativo, en el marco del Día Internacional de la Niña que se celebra a escala mundial cada 11 de octubre.

“El mensaje que hemos traído a las niñas es muy poderoso. Estamos conscientes de que debemos trabajar con ellas y para ellas. Hoy hemos venido un grupo de mujeres trabajadoras y emprendedoras que buscamos un cambio para que las niñas tengan una calidad de vida como se merecen, con amor, y con cuidado y por ello estamos trabajando en una campaña para erradicar la violencia. En este día es fundamental resaltar los derechos que tienen las niñas y recordar cuan importante es fomentar la igualdad, pues tanto niños y niñas compartimos los mismos intereses”, destacó Rocío de Moreno.

La autoridad exhortó a las niñas a nunca decaer en sus metas, para lo cual, dijo, deben seguir esforzándose y estudiando. “Tenemos muchas cosas para sentirnos orgullosas. Lo más importante es que cada día aprendamos algo nuevo”, acotó.

La capitana de las Fuerzas Armadas, Cristina Mejía, quien fue una de las invitadas especiales de este encuentro, recalcó las oportunidades que ahora tienen las mujeres, sin embargo, aseveró que estas solo pueden ser aprovechadas cuando se pone todo el esfuerzo. “Recuerden que las mujeres podemos hacer un millón de cosas y las podemos hacer bien. No se dejen desvanecer, sean perseverantes y luchen por sus sueños”, señaló.

Con este criterio coincidió la médica y ministra de Salud, Verónica Espinosa, la cual acotó que la clave para lograr las metas es nunca decir “no puedo y una vez que estemos convencidos de ello, los horizontes nunca tendrán final”, puntualizó.

Ruth Mejía, bombera de Quito y quien formó parte de este encuentro, destacó que su trabajo demanda de esfuerzo como cualquier otra profesión y recomendó a las niñas luchar por sus anhelos pues no existen profesiones para hombres y mujeres “no dejen que nadie les diga que no pueden”, dijo.

Rocío de Moreno, resaltó que el Gobierno se encuentra emprendiendo varias acciones con el objetivo de reducir la brecha cultural que existe entre hombres y mujeres. Y precisamente una de las acciones visibles de este esfuerzo es Misión Mujer la cual busca mejorar la calidad de vida de las ecuatorianas, especialmente aquellas que se encuentran en situación de vulnerabilidad, promoviendo el empoderamiento y la exigibilidad de las mujeres en sus derechos.

Al final de la visita, Rocío de Moreno entregó a los estudiantes y autoridades de la institución un retrato de Manuela Espejo, mujer referente de unos de los principales programas del Plan Toda Una Vida, iniciativa que está cambiando la vida de miles de ecuatorianos.

“Todas las niñas del mundo podemos cumplir nuestros sueños, pues el ser mujeres no nos hace más débiles. Todos en el mundo somos iguales”, concluyó Camila Sampedro, estudiante de nueve años de la institución.

Durante esta actividad también participaron Isabel Maldonado, secretaria Técnica del Plan Toda una Vida; y Berenice Cordero, ministra de Inclusión Económica y Social, quienes dejaron su mensaje de superación a través de sus experiencias de vida como madres y profesionales.

Quito, 11 de septiembre de 2018.