MSP firma convenio con fundación Cecilia Rivadeneira para beneficio de niños con enfermedades catastróficas

Quito, 01 de junio de 2020

Las enfermedades catastróficas no discriminan edad, género, ni condición; por ello, los niños y niñas son más vulnerables en condiciones extremas como las suscitadas en estos últimos tiempos a causa de la pandemia.

En el marco de la conmemoración del Día del Niño, el Ministerio de Salud Pública (MSP) firmó el convenio de Cooperación Interinstitucional con la Fundación Cecilia Rivadeneira, con el fin que las instalaciones de la Escuela Granja puedan acoger a niños con enfermedades catastróficas que se encuentran internados en el Hospital Pediátrico Baca Ortiz, de Quito.

“Los niños y niñas tienen derecho a la salud, y como Gobierno Nacional tenemos la obligación de ofrecer tratamientos en la mejor de las condiciones, y este paraíso chiquito que ustedes han construido acá (Escuela Granja) les ofrece (…) será un alivio para los padres, los niños en especial, y también para el Hospital Baca Ortiz, para que puedan venir acá y tener esta isla de paz, esta isla de comodidad, y tranquilidad. (…) Cuenten de hoy en adelante con todo nuestro apoyo”, aseguró el ministro de Salud Pública, Juan Carlos Zeballos, durante el evento.

Por su parte, Wilson Merino, director ejecutivo de la fundación, dijo que la firma del  Convenio Marco de Cooperación Interinstitucional rompe el paradigma de la salud tradicional, y propone un modelo colaborativo de innovación en la salud infantil. “En un momento tan crítico para el país, debemos sumar y multiplicar oportunidades en beneficio de los más necesitados, para que puedan ejercer su derecho a la salud”, expresó Merino.

Este trabajo articulado surge en el contexto de la emergencia sanitaria que ocasionó la interrupción de tratamientos oncológicos de cientos de niños y niñas, que muchos de ellos están en situación de pobreza. Además, nace el peligro al que se enfrentan los menores hospitalizados en el Hospital Baca Ortiz, al estar expuestos al contagio de niños con casos positivos de COVID-19, convirtiéndose en una amenaza extrema para quienes tienen enfermedades no transmisibles como el cáncer.

Este convenio, con vigencia de 5 años, también contempla actividades de promoción, prevención y capacitaciones sobre el cáncer infantil; al igual que la designación de personal de salud y abastecimiento de insumos médicos para los pacientes que continuarán sus tratamientos ambulatorios de quimioterapia y radioterapia en nuestra sede.

Esta alianza demuestra los resultados que pueden generar la sociedad civil y el sector público. Marca, también, una nueva ruta para más colaboraciones con impactos positivos en la salud de los niños y niñas, en la que puede sumarse el sector privado, a fin de multiplicar estos esfuerzos en beneficio de las poblaciones más vulnerables.